Darwin Castro y sus guías entrenan con esperanza de retomar competencias

Darwin Castro, deportista con discapacidad, entrena diariamente.

Quito (Pichincha).- Para todos los deportistas la emergencia ha significado cambios profundos en su cotidianidad, desde la vida diaria hasta su preparación técnica y física. Darwin Castro, atleta con discapacidad visual (T11), es parte del Plan de Alto Rendimiento y una de las figuras más representativas de nuestro deporte paralímpico, quien, al igual que muchos deportistas, ha tenido que adaptarse a las nuevas circunstancias provocadas por el Covid-19.

“Con la emergencia tuvimos un cambio rotundo, total. El Covid-19 nos deja a todos muchas enseñanzas, como a cuidarnos mejor, a ser más meticulosos con nuestra higiene personal, en especial a los deportistas de alto rendimiento»

Castro trabaja desde hace algunos años junto a su guía Sebastián Rosero, han conquistado varios títulos en diversos eventos internacionales en representación del Ecuador. Fueron los primeros en obtener un Diploma Paralímpico para el país en Río 2016, por el séptimo lugar en los 5000 m. Así mismo, en Toronto 2015, conquistaron medalla de bronce en los 5000 m, en Lima 2019 también dejaron al país por lo alto al lograr oro en los 5000 m.

A esta dupla también se suma Diego Arévalo, guía que complementa la estrategia del profesor Julio Chuqui que actualmente los sitúa entre los mejores del mundo y con grandes opciones para ser parte de los Juegos Paralímpicos de Tokio.

Entrenaban en Cuenca, pero pasaron los primeros 80 días de la emergencia en Quito para estar en casa con sus familias. El confinamiento lamentablemente alteró todo el trabajo que tenían establecido en su planificación y competencias, como el Grand Prix de Sao Paulo, que iba a realizarse en marzo donde pensaban mejorar sus marcas.

“Con la emergencia tuvimos un cambio rotundo, total. El Covid-19 nos deja a todos muchas enseñanzas, como a cuidarnos mejor, a ser más meticulosos con nuestra higiene personal, en especial a los deportistas de alto rendimiento ya que un descuido de los protocolos establecidos podría hacer que termine nuestra carrera deportiva, así que a cuidarnos mejor, a tener más conciencia de este tipo de situaciones”, indicó Rosero.

Nunca dejaron la actividad, pero su trabajo se limitó a entrenar en bicicletas estáticas y elípticas, a realizar rutinas de fuerza, con la finalidad de no perder la forma física. El 1 de junio retornaron a Cuenca gracias a la aprobación de los lineamientos de reactivación del deporte de alto rendimiento, por lo que retomaron sus entrenamientos y empezaron a recuperar su estado óptimo.

Al comienzo, salieron a trabajar en las riberas de los ríos de Cuenca, a finales el COE cantonal permitió el uso de la pista atlética del Estadio Alejandro Serrano Aguilar, donde entrenan desde hace tres semanas intensificando las sesiones para poder estar en condiciones de competencia dentro de 2 meses.

Todavía la Federación Internacional de Para atletismo no define un calendario competitivo hacia los Juegos Paralímpicos de Tokio que se realizarían a partir del 24 de agosto de 2021. Por lo pronto, nuestros atletas se siguen preparando con la ilusión de brindar nuevas alegrías al país. SB/Secretaría del Deporte (22.07.2020)